Problemas en primera ronda son costumbre para Lakers





EL SEGUNDO, California, EE.UU. (AP) -- Los Lakers de Los Angeles estaban en este mismo atolladero hace un año: empatados 2-2 en su serie de primera ronda de la postemporada con un equipo joven y hambriento de triunfos.

Entonces, los Lakers superaron con mano experta al Thunder de Oklahoma City. Pero esta vez, en la serie que continúa el martes en Los Angeles, los Hornets de Nueva Orleáns les presentan un dilema novedoso.

Uno de los factores es Chris Paul, el base de los Hornets que ha penetrado como ningún otro la defensa de los Lakers.

Paul anotó 33 puntos y dio 14 asistencias en el primer partido y tiene en la serie un promedio de 25,5 tantos, 11,5 asistencias y siete rebotes. En el cuarto encuentro, logró el primer "triple doble" de un rival de los Lakers en los 712 partidos de postemporada de su historia.

Otro problema clave es el tobillo izquierdo de Kobe Bryant, cuya torcedura podría ser más seria que otras lesiones que el astro ha arrastrado en temporadas pasadas.

Bryant recibió compresas de hielo y masajes durante el vuelo a Los Angeles, que aterrizó a las 3:30 de la mañana del lunes, y luego rechazó más tratamiento. Prefirió llegar al quinto partido sin saber qué tan grave es la lesión.

"El dice que jugará", dijo el entrenador Phil Jackson sobre Bryant, que no habló con la prensa. "No deja que se lo traten... No importa, jugará mañana, ésa es su actitud".

Los bicampeones reinantes enfrentan un juego clave el martes en el Staples Center de Los Angeles. Tendrán que apelar a su larga experiencia en playoffs para avanzar camino al tricampeonato.

"Estamos en la misma posición (que en 2010), en cuanto a que estamos empatados", dijo el ala pivote español Pau Gasol, el cuarto anotador de los Lakers en la serie contra Nueva Orleáns con 12,3 puntos por partido y apenas 39,5% de efectividad en tiros de campo, la peor del equipo.

"Sólo tenemos que asegurarnos de salir a ganar el quinto partido como lo hicimos en el pasado, porque sabemos lo importante que es", agregó.

Sin embargo, tras 67 partidos de postemporada en los últimos tres años, a los Lakers les está costando cada vez más encontrar esa energía que necesitan para eliminar a sus contendientes.

"Ciertamente juegan mejor cuando están desesperados, no hay duda de eso", dijo Jackson luego de la práctica del lunes. "Estaban sombríos, entienden lo que tenemos que hacer con este equipo".